Sobre la fundación de la Obra, para no tener que explicarlo con mis torpes palabras, les dejo unas notas de San Josemaría, el fundador, que explican lo que pasó ese 2 de octubre de 1928 y por qué se le dio ese nombre.
“Recibí la iluminación sobre toda la Obra, mientras leía aquellos papeles [apuntes de un retiro que estaba dirigiendo]. Conmovido me arrodillé ‑estaba solo en mi cuarto, entre plática y plática‑ di gracias al Señor, y recuerdo con emoción el tocar de las campanas de la parroquia de N. Sra. de los Ángeles. (... ) recopilé con alguna unidad las notas sueltas, que hasta entonces venía tomando. (...) Desde aquel día el borrico sarnoso [como se llamaba a él mismo] se dio cuenta de la hermosa y pesada carga que el Señor, en su bondad inexplicable, había puesto sobre sus espaldas. Ese día el Señor fundó su Obra”. Anotación del Fundador del Opus Dei en sus Apuntes íntimos, n. 306 (2‑X‑1931)
“Y llegó el 2 de octubre de 1928. Yo hacía unos días de retiro, porque había que hacerlos, y fue entonces cuando vino al mundo el Opus Dei. Aún resuenan en mis oídos las campanas de la iglesia de Nuestra Señora de los Ángeles, festejando a su Patrona. El Señor "ludens...omni tempore, ludens in orbe terrarum" (Prov 8, 30‑31), que juega con nosotros como un padre con sus niños pequeños, aunque ya no seamos criaturas de poca edad, viendo mi resistencia y aquel trabajo entusiasta y débil a la vez, me dio la aparente humildad de pensar que podría haber en el mundo cosas que no se diferenciaran de lo que El me pedía. Era una cobardía poco razonable; era la cobardía de la comodidad, y la prueba de que a mí no me interesaba ser fundador de nada...”. Recuerdos de San Josemaría en una Meditación, 14‑11‑1964
“Yo no puse a la Obra ningún nombre. Hubiera deseado, de ser posible ‑no lo era‑, que no hubiera tenido nombre, ni personalidad jurídica (...). Mientras, llamábamos a nuestra labor sencillamente así: ‘La Obra’”. Anotación del Fundador del Opus Dei en sus Apuntes íntimos, n. 1867 (14‑VI‑1948)
“Pero volvamos al nombre de nuestra Obra. Un día fui a charlar con el P. Sánchez, en un locutorio de la residencia de la Flor. Le hablé de mis cosas personales (sólo le hablaba de la Obra en cuanto tenía relación con mi alma), y el buen padre Sánchez al final me preguntó: ‘¿cómo va esa Obra de Dios?’ Ya en la calle, comencé a pensar: Obra de Dios. ¡Opus Dei! Opus, operatio..., trabajo de Dios. ¡Éste es el nombre que buscaba!" Y en lo sucesivo se llamó siempre Opus Dei”. Anotación del Fundador del Opus Dei en sus Apuntes íntimos, n. 1868 (14‑VI‑1948)
De esta página saqué las notas: http://www.opusdei.es/art.php?p=16996
La página principal del Opus Dei es: http://www.opusdei.es/
“Recibí la iluminación sobre toda la Obra, mientras leía aquellos papeles [apuntes de un retiro que estaba dirigiendo]. Conmovido me arrodillé ‑estaba solo en mi cuarto, entre plática y plática‑ di gracias al Señor, y recuerdo con emoción el tocar de las campanas de la parroquia de N. Sra. de los Ángeles. (... ) recopilé con alguna unidad las notas sueltas, que hasta entonces venía tomando. (...) Desde aquel día el borrico sarnoso [como se llamaba a él mismo] se dio cuenta de la hermosa y pesada carga que el Señor, en su bondad inexplicable, había puesto sobre sus espaldas. Ese día el Señor fundó su Obra”. Anotación del Fundador del Opus Dei en sus Apuntes íntimos, n. 306 (2‑X‑1931)
“Y llegó el 2 de octubre de 1928. Yo hacía unos días de retiro, porque había que hacerlos, y fue entonces cuando vino al mundo el Opus Dei. Aún resuenan en mis oídos las campanas de la iglesia de Nuestra Señora de los Ángeles, festejando a su Patrona. El Señor "ludens...omni tempore, ludens in orbe terrarum" (Prov 8, 30‑31), que juega con nosotros como un padre con sus niños pequeños, aunque ya no seamos criaturas de poca edad, viendo mi resistencia y aquel trabajo entusiasta y débil a la vez, me dio la aparente humildad de pensar que podría haber en el mundo cosas que no se diferenciaran de lo que El me pedía. Era una cobardía poco razonable; era la cobardía de la comodidad, y la prueba de que a mí no me interesaba ser fundador de nada...”. Recuerdos de San Josemaría en una Meditación, 14‑11‑1964
“Yo no puse a la Obra ningún nombre. Hubiera deseado, de ser posible ‑no lo era‑, que no hubiera tenido nombre, ni personalidad jurídica (...). Mientras, llamábamos a nuestra labor sencillamente así: ‘La Obra’”. Anotación del Fundador del Opus Dei en sus Apuntes íntimos, n. 1867 (14‑VI‑1948)
“Pero volvamos al nombre de nuestra Obra. Un día fui a charlar con el P. Sánchez, en un locutorio de la residencia de la Flor. Le hablé de mis cosas personales (sólo le hablaba de la Obra en cuanto tenía relación con mi alma), y el buen padre Sánchez al final me preguntó: ‘¿cómo va esa Obra de Dios?’ Ya en la calle, comencé a pensar: Obra de Dios. ¡Opus Dei! Opus, operatio..., trabajo de Dios. ¡Éste es el nombre que buscaba!" Y en lo sucesivo se llamó siempre Opus Dei”. Anotación del Fundador del Opus Dei en sus Apuntes íntimos, n. 1868 (14‑VI‑1948)
De esta página saqué las notas: http://www.opusdei.es/art.php?p=16996
La página principal del Opus Dei es: http://www.opusdei.es/
P.D.: El de la foto, para los que no lo conocen, es San Josemaría.
1 comentario:
Pensé que era más antiguo el Opus Dei. Mucho más antiguo.
Salú!
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